Borrar
¿Qué ha pasado hoy, 18 de abril, en Extremadura?
Vuelta al ruedo de 'Bailarinito':: DAVID PALMA
Un gran toro de Luis Terrón en Plasencia

Un gran toro de Luis Terrón en Plasencia

Los tres rejoneadores abandonaron el coso de Las Golondrinas a hombros tras cortar dos orejas en el conjunto de sus faenas

Pepe Orantos

Lunes, 13 de junio 2016, 07:47

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Plasencia A medida que los aficionados al caballo van ganado terreno en los tendidos a los aficionados al toreo a caballo en los festejos de rejones, las lidias a caballo corren el riesgo de convertirse en competiciones de doma en las que público y presidencia puntúan a base de orejas. Eso sí, viendo el aspecto que mostraba ayer el graderío de la plaza de toros de Plasencia, rozando el lleno, dudo mucho que haya ningún empresario dispuesto a perder la innegable fuente de ingresos que generan estos festejos a la hora de cuadrar económicamente una feria.

FICHA DEL FESTEJO

  • Toros. Luis Terrón, muy bien presentados y de juego desigual, destacando el tercero de la tarde que fue premiado con una vuelta al ruedo.

  • Toreros. Pablo Hermoso de Mendoza dos orejas y saludo; Andy Cartagena

  • Plaza. Tercer festejo de la Feria de Plasencia, casi lleno en los tendidos en una tarde agradable con una ligera brisa que no dificultó a los actuantes. Dos horas y media de función.

El de ayer fue un espectáculo al que sólo la irrupción de un excelente toro de Luis Terrón sacó de una sucesión de exhibiciones de manejo de caballo en la cara de los toros. El animal, de nombre 'Bailarinito' y de 505 kilos de peso, demostró desde su salida por la puerta de toriles que no tenía nada que ver con los dos hermanos que le precedieron. Con una movilidad excepcional, buscó a caballo y jinete con ahínco a lo largo del primer tercio, pero fue en banderillas donde se descubrió como una auténtico dechado de virtudes, que Leonardo Hernández captó enseguida, tratando de hacer ver al público las posibilidades que tenía de triunfo.

'Bailarinito' se arrancó hasta cinco veces en largo hacia Leonardo, que sólo acertó a clavar la banderilla en tres de ellas, ante el regocijo de un público completamente enloquecido ante lo espectacular de los lances.

Tan embebido estaba Leonardo en la faena que, llegado el momento de asir el rejón de muerte, pidió en dos ocasiones la colaboración del público para solicitar a la presidencia el indulto del animal. Sin embargo la negativa de facto de la presidencia y que el clamor del público no fue lo suficientemente intenso, abortaron ese intento de indulto y descentraron algo al rejoneador extremeño, que necesitó tres pinchazos y un rejón más para ver doblar a quien tanto le había ayudado durante su actuación. Al final, lo que iba para triunfo grande, se quedó en una oreja y vuelta al ruedo para 'Bailarinito'.

Con el sexto de la tarde Leonardo quiso resarcirse pero ya no tuvo enfrente tanta ayuda, sin embargo aprovechó el segundo mejor toro del encierro para reivindicarse como el figurón que es del arte del rejoneo y demostrar que las seis orejas cortadas en Las Ventas esta temporada en dos corridas no fueron fruto de la casualidad.

Brillantes encuentros con su enemigo en banderillas, adornos ecuestres entre el alboroto de los tendidos y mucha firmeza en su toreo a caballo acabaron por concederle la oreja que le permitió abandonar la plaza de Plasencia a hombros en compañía de sus dos colegas en el cartel.

Esta actuación de Leonardo sólo tuvo la sombra de un desgraciado accidente de uno de sus caballos que tras sufrir lo que parecía un espasmo muscular en una de su para derecha, tuvo que abandonar la plaza por el callejón, ante la preocupación de profesionales y público.

La cuadra de Pablo Hermoso

Que los caballos de rejoneo se hayan convertido casi en estrellas de rock y los aficionados los conozcan por su nombre es debido, en gran parte la innegable labor de Pablo Hermoso de Mendoza y su cuadra. Cuando 'Alquimista' hizo su entrada por la puerta de cuadrillas del coso placentino para abrir plaza, los más entendidos ya sabían que el espectáculo estaba asegurado. Dos rejones de castigo para dar paso a 'Berlín' y 'Beluga', que pusieron de su parte en banderillas todo lo que no pudo hacer el ejemplar de Luis Terrón al que se enfrentó.

'Ágora' fue el encargado del último tercio, que el navarro ejecutó con una gran contundencia, hasta el punto de que el toro ya había doblado cuando llegaron los peones de su cuadrilla. Tanta fue la efectividad que público y presidencia concedieron al alimón las primeras dos orejas de la tarde.

El cuarto fue más de lo mismo, grandes exhibiciones de doma y precisión de Pablo Hermoso de Mendoza al clavar los arpones y un ejemplar de Luis Terrón que, pese a mostrar movilidad y hacer por el caballo, no tuvo el desplazamiento que hubiera requerido un mayor espectáculo. Quien antes entendió que podía ponerse de su parte al público de ayer en Plasencia forzando la máquina de las cabriolas de su cuadra fue, sin duda, Andy Cartagena. El de Benidorm comprendió pronto que no había tenido suerte con el lote de Luis Terrón que le había tocado y trató de ganarse al respetable con un despliegue de habilidades a caballo que en algunos casos rozaron lo circense.

A tal punto llegó la exhibición que, una vez había doblado el primero de sus toros, escenificó un sainete en el centro del ruedo con un precioso caballo de capa Appaloosa, para pedir al público que insistiera con su petición de una segunda oreja que le abrió la puerta grande del coso de Las Golondrinas.

Entre los esperpentos, no faltó otro caballo que mordió en reiteradas ocasiones el morrillo de su segundo contrincante entre el alborozo de parte del público que festejó la ocurrencia, ya que no pudo celebrar su acierto con los aceros.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios