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El director Damián Szifron.
Szifron, el toque argentino de los Goya

Szifron, el toque argentino de los Goya

Su capacidad para recrear situaciones posibles ha sido llevada al extremo en los 'Relatos salvajes' con los que compite en los Goya, parábolas de lo que podría ser y no es por las restricciones sociales

diego casado

Miércoles, 28 de enero 2015, 20:45

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El capital de los hermanos Almodóvar ha hecho posible que un director bonaerense desembarque este año en la fiesta del cine español y opte al premio al mejor realizador por la excepcional «Relatos Salvajes», también nominada al Oscar. La cinta cuentan con un 39% de inversión española, lo que la ha habilitado para participar en la ceremonia y optar a nueve «cabezones», entre ellos el de mejor película, mejor director y mejor guión. Estos dos últimos los recogería Damián Szifron (1975), que a sus 39 años acudirá por primera vez a la gala, con muchas papeletas para salir de ella premiado.

Szifron es casi un completo desconocido para la mayoría de españoles. Su primer trabajo, el drama «En el fondo del mar» (2003), ni siquiera llegó a estrenarse en España. La segunda película que rodó fue «Tiempo de valientes» (2006), una comedia protagonizada por un psicoanalista y un detective. El título tuvo mejor acogida a este lado del Atlántico y fue vista por casi 200.000 personas en las salas del país, una cifra respetable que se queda pequeña comparada con su último taquillazo, «Relatos salvajes», que ha conseguido de momento medio millón de espectadores y una larga lista de nominaciones a premios.

Sin embargo, lo que más se conoce en España es el producto de su talento al escribir. De la pluma de Szifron salieron los guiones de dos series de televisión argentinas de tremendo éxito, «Los simuladores» y «Hermanos y detectives». Tanto funcionaron en su país que Cuatro compró los derechos de la primera en España y la emitió con una audiencia superior al millón de espectadores semanales. De la segunda, que fue producida para Telecinco, aún se recuerda el papel de subcomisario Serrano del desaparecido Álex Angulo, que protagonizó la serie entre los años 2007 y 2009.

El cine de Szifron proviene de los sueños, del futuro y se aleja todo lo que puede de la realidad. Él imagina, no describe lo que existe. Lo hace en la gran pantalla y también en la pequeña, que ha utilizado como refugio seguro mientras ideaba sus películas de mayor formato. Su capacidad para recrear situaciones posibles ha sido llevada al extremo con estos «Relatos salvajes» con los que compite en los Goya, parábolas de lo que podría ser y no es por las restricciones sociales. «En realidad, solo he plasmado qué ocurre cuando respondemos a ese deseo de liberación», decía durante su última visita a España, durante la que dio una masterclass en Madrid.

El realizador huía de polémicas sobre la violencia expresa que plantea su película como reacción a los problemas: «No hay moraleja ni tampoco tragedia en dejarse llevar, simplemente planteo cómo sería el placer de perder el control en situaciones diversas», se justificaba. Más vehemente habló en su país sobre el fondo de la trama, donde llegó a afirmar que, si le faltara el pan para comer «sería delincuente». Veremos cuál de las dos caras muestra en su estreno en la fiesta del cine español, en la alfombra roja y cuando suba -que subirá- a recoger uno de los galardones.

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