Borrar
Manuel Alcántara: «Voy por libre, hay que equivocarse uno solo»

Manuel Alcántara: «Voy por libre, hay que equivocarse uno solo»

El "plusmarquista" de los articulistas españoles agradece el reconocimiento. Pero sin envanecimiento: "El que se crea muy importante es un chalado"

REGINA SOTORRÍO

Martes, 9 de mayo 2017, 10:38

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Faltaban pocas horas para que al otro lado del mundo se escuchara su nombre y se aplaudiera su trayectoria. La Asociación Española de los Eisenhower Fellowships premiaba en Nueva York a Manuel Alcántara con el First Amendment Award 2017 en reconocimiento a toda una carrera. Pero el poeta y articulista es un hombre de costumbres y la trascendencia de la distinción no las alteró: escribió su columna diaria, almorzó en el Palo con su buen amigo Juan López Cohard y tomó un Dry Martini de aperitivo. Solo hizo una concesión: "Un trago a vuestra salud", dijo levantando la copa en agradecimiento a quienes desde tan lejos valoran su trabajo. "A falta de otras virtudes, tengo la de la gratitud", declaró.

Sus 89 años "No sabía que iba a durar tanto, pero aquí me tienes" le impidieron viajar a Nueva York para recibir el galardón, que recogió en su nombre el director de SUR, Manuel Castillo.Se le entregará en persona el próximo mes de septiembre en un acto en su honor que se celebrará en Málaga.

El First Amendment Award reconoce anualmente a aquellas personas o empresas que se han comprometido en la defensa y promoción de la libertad de expresión y de prensa. Principios que fueron protegidos por el presidente estadounidense Dwight D. Ike Eisenhower y que el maestro Manuel Alcántara cumple. "Yo voy por libre, hay que equivocarse uno solo. No al servicio ni al mandato de nadie", sentenció.

Con su habitual ironía, Alcántara reconoció que los premios le "gustan más que los castigos", pero el malagueño hizo gala de humildad y quiso restar importancia a su labor: "Yo no me merezco nada. Yo simplemente soy el más veterano de los cronistas de España". Ni más ni menos. Es el "plusmarquista" de la prensa nacional, con más de 20.000 artículos publicados prácticamente a diario desde hace 59 años. Desde los 80 su firma aparece en SUR y en los periódicos regionales de Vocento. Es, por tanto, el articulista más leído de España. Pero con la contundencia que da la experiencia, advirtió: "Nada de envanecimiento. Lo que ha disminuido mucho con los años es la pedantería. Todo el que crea que es muy importante es un chalado. Lo importante es vivir, nada más". Alto y claro.

Y su forma de vivir, su "manera de estar en el mundo", consiste en sentarse cada día frente a su veterana máquina de escribir, su Olivetti, para sacar adelante la columna responsable de que los lectores empiecen a leer el periódico por el final. "Y no me cansa porque para mí es como afeitarme por las mañanas, algo de todos los días", aseguró. En esto también sigue su rutina recuerden que es un hombre de costumbres, porque la inspiración "no se improvisa, se convoca con el trabajo de todos los días": el maestro lee cuatro periódicos diarios "buscando un toro que por lo menos permita lo que los taurinos llaman hacer una faena de aliño, quedar bien".

Pero el resultado no es un mero análisis de la actualidad. Es, como resaltó Manuel Castillo en el acto celebrado en Nueva York, "una pieza breve en una síntesis que solo se puede calificar de poética". Porque para Manuel Alcántara "todo está en la poesía, la poesía es la madre de todo". Y el maestro añadió más: "No he querido ser más que dos cosas en mi vida. Poeta y articulista, y las dos cosas las he cumplido".

Desde un rincón de El Palo, con un Dry Martini en una mano y un cigarrillo en la otra, Alcántara agradeció el galardón y expresó su deseo de corresponderlo: "Dar las gracias, que lo sepan y lo noten". Especialmente por significar el reconocimiento "de haber sido un trabajador bastante constante". "Eso de que no te olviden casi al final es muy importante", admitió emocionado. Eso sí, insistió en que para él el auténtico premio es conseguir levantarse cada día y escribir. Le cuesta acostumbrarse a los años "voy camino de los 90" y a una "disminución de presuntas facultades que es dolorosa", pero es consciente de que el récord que él ha batido en la prensa española será difícil de igualar. "Quien quiera hacerlo tiene que aplicarse y durar. Y durar no es lo mismo que vivir", puntualizó. Él ya no pide vivir muchos años: "Quiero vivir el día siguiente". Un brindis por ello... "que el hígado me ha salido bueno".

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios