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Aspecto desértico con el suelo endurecido y repleto de grietas en el embalse. :: altamirano
El septiembre más seco de la serie histórica deja bajo mínimos Valdesalor

El septiembre más seco de la serie histórica deja bajo mínimos Valdesalor

El pantano se encuentra solo al 18 por ciento de su capacidad, lo que significa que ya han desaparecido la mayor parte de zonas de pesca

MANUEL M. NÚÑEZ

CÁCERES.

Domingo, 15 de octubre 2017, 08:36

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Domingo deportivo en Valdesalor. La Sociedad de Pescadores de Cáceres organiza uno de sus concursos tradicionales. Lo llaman día familiar y de féminas. La cita arranca a primera hora en el pantano. Sin embargo, la escena está lejos de ser la habitual. Practicar esa afición a la pesca es sencillamente imposible en buena parte del embalse. El agua se ha evaporado. El espacio natural de las carpas es ahora un terreno árido y desértico en el que hasta los perros que salen a pasear con sus dueños notan la dureza del pedregal. El septiembre más seco de la serie histórica deja huella. Las zonas de pesca desaparecen y el embalse ya solo llega al 18 por ciento de su capacidad. Son apenas 2,6 hectómetros cúbicos de los 14 que tiene en total.

Para recordar la última vez que llovió en Cáceres hay que tener buena memoria. Eso o consultar a la Agencia Estatal de Meteorología en Extremadura (Aemet). Las últimas lluvias registradas se remontan a finales de agosto. Fueron tres días seguidos de agua, el 27, 28 y 29 de agosto. 22 litros por metro cuadrado. Desde entonces, más de mes y medio después, nada. Ni una gota.

LOS DATOS

  • Precipitaciones

  • Septiembre más secoLitros/m2

  • 1 20170

  • 2 1988 0

  • 3 20040,2

  • Media32,6

  • Años más lluviososLitros/m2

  • 1 1998867

  • 2 2001 764

  • 3 1988763

  • 22 2017469

  • Media525,9

  • Años más secosLitros/m2

  • 1 2012245

  • 2 1981 247

  • 3 1989300

  • Desde cuándo no llueveLitros/m2

  • 29-8-201712

«¿Normal? No, claro. De hecho hemos tenido un septiembre muy seco con casi nula precipitación sobre Extremadura», analiza Marcelino Núñez. El delegado territorial de Aemet añade que además «se han superado los máximos de insolación históricos para un mes de septiembre». El informe mensual de Aemet alude a un septiembre «extremadamente seco» pero a la vez «cálido respecto a las temperaturas medias». «La persistencia de la estabilidad atmosférica -insiste Aemet- ha sido la causa de que los cielos hayan estado continuamente despejados, causando la ausencia de precipitaciones». En el caso de Valdesalor, esa falta de agua ha tenido un efecto devastador para quienes acuden al pantano a pescar.

Por muchos carteles informativos de la Sociedad de Pescadores o reseñas en paneles acerca del coto de pesca, la realidad es que la mayoría de las áreas que ocupaban los propios pescadores ya no están. Como en 2012, el año más seco que reflejan las estadísticas, de nuevo es posible hacer la foto de algunos vehículos que cruzan de una orilla a otra.

Antonio Cisneros, secretario del colectivo de pescadores, lo lamenta. «Es una pena ver eso así. Los pescadores sufrimos esa sequía, la imagen es deprimente. La única alegría es que al menos no han aparecido peces muertos en la orilla por falta de oxígeno», se consuela. Solo en la zona más próxima a la presa el agua mantiene un nivel suficiente para la práctica de la pesca. A medida que se avanza en dirección a la parte más cercana a Torreorgaz la tierra se impone al agua y solo se ven rocas, algunos árboles secos y un suelo agrietado.

Año hidrológico

El balance del año hidrológico, de septiembre a agosto, se cerró con 469 litros por metro cuadrado en Cáceres. Está «por debajo del valor de referencia (531), pero en el intervalo normal, muy cerca del intervalo de los años secos», detalla Marcelino Núñez. A pesar de esa 'normalidad' que reflejan las estadísticas, según el delegado de Aemet en Extremadura, «el déficit de precipitaciones no es despreciable».

Son 56,3 litros por metro cuadrado. Ello implica, sostiene, que «las precipitaciones del año hidrológico 2016-17 han supuesto solo el 89 por ciento del valor esperado». La media anual es de 525 litros por metro cuadrado en Cáceres. 1988, 1981 y 2012, por orden inverso en la estadística, fueron años especialmente secos en la provincia. En 2012 el pantano del Salor se encontraba al 23 por ciento, 3,3 hectómetros cúbicos.

Ahora los registros son todavía más modestos, apenas 2,6 hectómetros cúbicos de agua. Ello significa que el embalse valdesaloreño ya ha perdido más de 80 por ciento del agua que puede llegar a acumular al máximo de su capacidad.

Septiembre deja un déficit de 32,6 litros por metro cuadrado y el arranque de octubre va en la misma dirección. Paradójicamente, el verano en la capital cacereña se saldó con 23,1 litros por metro cuadrado, una cifra «superior a la media», resalta Marcelino Núñez. Ese promedio veraniego es de 17,6 . Con los números en la mano se puede hablar, por tanto, de un «verano húmedo», aunque el responsable de la Aemet hace un matiz importante: «Las precipitaciones veraniegas son poco relevantes respecto del total anual y no cambian tendencias».

El último septiembre encabeza con el de 1988 la lista de los más secos de la serie histórica. Por contra, en septiembre de 2014 se llegó a 126 litros por metro cuadrado, lo que equivale a una cuarta parte del total anual en Cáceres. En Valdesalor esa sequía extrema se constata. Menos pescadores que nunca y menos agua. Y el GPS perfectamente operativo. Por mucho que marque un punto en mitad del azul que debería ser el pantano y por donde una pareja pasea como si del mismísimo Moisés se tratase. Pero hay truco, es tierra firme.

(*) Aemet Extremadura

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