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C. NÚÑEZ
Jueves, 20 de octubre 2016, 10:30
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La Escuela Superior de Arte Dramático (ESAD) celebró ayer la inauguración oficial del curso con el optimismo que le da el aumento progresivo del número de alumnos. 99 se formarán este año en las disciplinas de Dirección e Interpretación. Se ha multiplicado por cinco el número de alumnado desde que este recinto educativo abrió sus puertas en 2009. En ese momento eran solo una veintena. Tal y como explicó su director, José Ramón Alonso de la Torre, el centro ofrece ya todas las condiciones físicas y de dotaciones para ir «a velocidad de crucero». Este año la demanda para iniciar el curso en Cáceres se ha doblado y ha llegado a 42, lo cual ha hecho que se haya creado un segundo grupo de primero de Interpretación, una nueva aula, un hecho insólito en la historia de la escuela. Además, De la Torre subrayó la variada procedencia del alumnado, que llega de muy diferentes puntos de España y también de países como Venezuela o Argentina.
El dramaturgo, pedagogo y director teatral José Antonio Hormigón fue el encargado de hacer el arranque oficial de este curso. El veterano y reputado autor articuló un motivador y académico discurso en el que justificó la necesidad de una buena formación para las profesiones artísticas. «Un centro formativo no puede buscar el descubrimiento de genios», argumentó, dándole mucha más importancia al estudio y la preparación que al intento de alcanzar la fama rápida. También subrayó el valor de un profesorado formado y el desarrollo de «la imaginación» más allá de los lugares comunes, entrenándola con actividades enriquecedoras.
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