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Imagen de la carpa instalada en la Plaza Mayor durante el pregón de Carnaval a cargo de J.C. Corrales el pasado viernes por la noche. :: j. rey
Ayuntamiento y Junta se enfrentan tras las protestas por los horarios de Carnaval

Ayuntamiento y Junta se enfrentan tras las protestas por los horarios de Carnaval

La administración regional indica que la carpa de la Plaza Mayor es competencia municipal como instalación portátil

Cristina Núñez

Martes, 9 de febrero 2016, 07:02

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La noche más desenfadada del año, la de la mascarada, el disfraz y el desenfreno, se vivió en Cáceres de una forma más que descafeinada. Muchos se tuvieron que ir a dormir antes de lo esperado. «Se echó por tierra todo lo que habíamos venido haciendo en los últimos años», resumía ayer Marisa Iglesias, la presidenta de la Asociación Cáceres Carnaval.

La fiesta, que durante más de una década había estado adormecida en Cáceres, repuntó el pasado sábado con un desfile numeroso y digno, en el que participaron un millar de personas. La carpa instalada en la Plaza se llenó, pero la fiesta no duró toda la noche. Antes de las tres de la mañana la Policía Local informaba a los responsables de esta instalación, de 800 metros, que gestionaba el grupo 'La Gran Familia', de que tenían que ir terminando. La carpa se cerró (también los bares de Pizarro y La Madrila) y se abrió la polémica con un áspero cruce de acusaciones entre el Ayuntamiento cacereño y la Junta de Extremadura a lo largo de la jornada de ayer.

Como suele suceder en periodos especiales del año, como Navidad o Womad, la Junta emitió una resolución en la que se permitía prorrogar en dos horas el horario de cierre de los bares. Como novedad, incluyó que quedaban excluidos de este horario especial los establecimientos ubicados «en zonas declaradas saturadas por acumulación de ruidos», atendiendo así a peticiones de la Asociación contra el ruido, según indicaron ayer a este diario . Esta resolución fue publicada en el Diario Oficial de Extremadura (DOE) del pasado 2 de febrero, martes.

Tres días después, el pasado viernes 5 de febrero, el Ayuntamiento reparó en este detalló y solicitó vía fax a las 13.20 horas que las dos horas extra también se hicieran extensibles a todos los locales de hostelería, incluidos los de las zonas saturadas. A través de un comunicado, el Consistorio acusaba ayer a la Junta de discriminar a estas zonas y se quejaba amargamente de no haber tenido respuesta a su petición, pese a ser «un día laboral». Así las cosas, decidió aplicar lo aparecido en el DOE y la Policía Local controló el horario de cierre en la carpa y bares de Pizarro y Madrila.

Según la administración regional, el Ayuntamiento no hizo bien su petición. Le reprocha a los responsables municipales que la Secretaría General de Política Territorial y Administración Local no recibiera ninguna solicitud formal de ampliación de horario, «únicamente un breve escrito, vía fax, el mismo día 5 de febrero a las 13,20 horas, sin constancia oficial ni Registro de salida desde ese Ayuntamiento». Tal y como argumenta la Junta, ese fax llegó «sin la antelación suficiente», puesto que la solicitud se hace incluso para un periodo que empieza un día antes, el 4.

La petición enviada por fax desde el Palacio de la Isla consta de 10 líneas, está firmada por Valentín Pacheco en calidad de alcalde (tiene sello de alcaldía) y efectivamente, no cuenta con registro de salida. Como se ha dicho, la solicitud se hizo más de 72 horas después de su publicación en el DOE.

Por el contrario, en su respuesta pública, la Secretaría General de Política Territorial y Administración Local pone com ejemplo de solicitud bien hecha la del ayuntamiento Badajoz, que fue remitida el día 28 de enero y en la que se pedía, con cinco apartados de argumentos, no solo dos horas más para los bares, sino libertad de horarios para todos los días de Carnaval. Le fue concedido el día 3 de febrero.

En cualquier caso, según la Junta de Extremadura, la carpa de Carnaval de la Plaza Mayor debería haber sido ajena a todo este disputa administrativa porque, según explica, no está sujeta al mismo horario que los establecimiento hosteleros al no tratarse de un local, sino de «instalaciones eventuales, portátiles o desmontables», como las casetas de feria, según recuerda. Por tanto, «es el Ayuntamiento de Cáceres el que ha de autorizar la citada carpa y fijar su horario», subraya.

Es decir, que la carpa podía haber seguido abierta el tiempo que el consistorio hubiera considerado oportuno, según expone la Junta citando el Reglamento General de Espectáculos públicos y Actividades Recreativas.

Por otro lado, los concejales socialistas Luis Salaya y María Ángeles Costa se reúnen esta mañana precisamente con la secretaria general de Política Territorial y Administración Local de la Junta de Extremadura, Nieves Esteban Paz, responsable de la resolución de la polémica que incluyó las zonas saturadas por primera vez en la norma de ampliación de horarios, y con la presidenta de la Asociación Cáceres Carnaval. Marisa Iglesias, muy afectada, indicó ayer que no descartan iniciar medidas legales por los perjuicios económicos que le ha causado el cierre prematuro de la carpa.

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