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Los costaleros ponen rodilla en tierra para sacar a María Santísima del Mayor Dolor

Los costaleros ponen rodilla en tierra para sacar a María Santísima del Mayor Dolor

En San Andrés tienen todo listo para desfilar con el Descendimiento, el gran conjunto escultórico de la Semana Santa de Badajoz

EVARISTO FERNÁNDEZ DE VEGA

Miércoles, 1 de abril 2015, 07:38

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Hubo una época en la que los cristos se desplazaban a ruedas. Le sucedió otra en la que llamaban locos a quienes se metían debajo de los pasos para portar sobre sus hombros las imágenes de la Semana Santa. Pero la figura del costalero se consolidó y durante años se convirtieron en pieza fundamental de la Semana Santa Pacense. Hasta que un buen día las cuadrillas cayeron en la cuenta de que habían envejecido y comenzaron a faltar los relevos. «Llegamos a ver el futuro muy complicado, porque nuestros hijos eran pequeños para sustituirnos y nosotros nos veíamos mayores», confiesa Ricardo Becerra.

Esos tiempos de escasez han pasado por fin y la Asociación de Costaleros y Capataces San José presume este 2015 del estreno en la calle de 55 porteadores que vienen a reforzar las cuadrillas encargadas de sacar a la calle cuatro de las procesiones más importantes de la Semana Santa de Badajoz.

El primer desfile de los costaleros de San José tuvo lugar anoche, con el Cristo de la Espina y hoy repetirán en San Andrés con el conjunto escultórico por excelencia de la ciudad de Badajoz, la magistral obra de Antonio Castillo Lastrucci que representa el momento en el que San Juan, José de Arimatea y Nicodemo bajan a Jesús de la cruz ante la mirada rota de su madre, representada en esta dura escena por la bella imagen de María Santísima de la Piedad.

Para Ricardo Becerra, presidente de la Asociación de Costaleros, resulta emotivo comprobar que entre los 55 nuevos cargadores abundan los chicos de 17, 18, 19 y 20 años. «Los menores de edad vienen con la autorización de sus padres. Para nosotros es un espaldarazo de futuro».

De los alrededor de 300 costaleros con los que cuenta la asociación, hay un importante grupo que participará en la procesión que sale hoy de la parroquia de San Andrés, sede de una cofradía que fue fundada el 28 de marzo de 1944.

Desde entonces han transcurrido 71 años y el encargado hoy de representar a la hermandad es Juan Manuel Rosado. «La cofradía funciona como un equipo, tan importante como el capataz es el costalero que va debajo del paso, y lo mismo ocurre con el resto de la gente, por eso yo doy tanto valor a los nazarenos y a todas las personas que participan en el desfile».

La hermandad de San Andrés da un valor fundamental a la caridad y todos los días 28, coincidiendo con la visita a la parroquia de los devotos de San Judas Tadeo, coloca una mesita en la que son depositados alimentos que luego se entregan a Cáritas Parroquial y familias necesitadas.

A esta obra social se suma el empeño por mantener el patrimonio artístico en perfecto estado. Por eso este año, con los ingresos que obtengan con la venta de la cera y las flores de la procesión, financiarán la restauración de la corona que usa Nuestra Señora de la Esperanza cuando está expuesta en su camerino.

Esta imagen saldrá por primera vez a la calle con la nueva lágrima que ha fijado en su rostro la licenciada en Bellas Artes Isabel Casado Sánchez-Simón. «Se le cayó durante el triduo y no la encontramos, así que la hemos sustituido por otra que guarda la proporción con el rostro», explica Juan Manuel Rosado.

Santo Domingo

La segunda procesión de este Miércoles Santo partirá a las 20.30 horas de la parroquia de Santo Domingo. Desde allí saldrá la única cofradía que pone en la calle cuatro pasos: Nuestro Padre Jesús Nazareno del Amparo, el Santísimo Cristo de la Fe, Nuestra Señora de la Piedad y María Santísima del Mayor Dolor.

José Fernando Fernández Perianes, hermano mayor en Santo Domingo, destaca el empeño que pone la hermandad en ornamentar los cuatro pasos. «El esfuerzo es mayor, también en número de costaleros, puesto que necesitamos 160 para sacar las cuatro imágenes y eso hace que no tengamos muchos relevos».

Este año, una de las principales novedades de la procesión será el momento en el que los costaleros se arrodillen para sacar el paso de María Santísima del Mayor Dolor. «Siempre ha salido muy justo y pensamos que de esa forma va a resultar más vistoso».

Tras esta procesión, a la 1 de la madrugada, partirá de la Iglesia de la Concepción la imagen de Nuestro Padre Jesús del Prendimiento. Subirá a la Plaza Alta, donde se celebrará un viacrucis tan sobrio como emotivo.

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