Bodas de plata con mascota

La idea de crear un huerto escolar con animales de granja fue planteada por el encargado de mantenimiento del centro, Juan Hernández Caballero, y rápidamente encontró el apoyo de la comunidad educativa, que presume ahora de tener un proyecto que permite a sus alumnos entrar en contacto con la naturaleza.

Mailo Corrales, jefa de estudios, es una de las profesoras que vivieron hace 25 años la inauguración del instituto. Recuerda que entonces no había pizarras digitales en las clases ni tampoco ordenadores. La tecnología apenas había entrado en el aula y el sistema de aprendizaje era distinto.

Un cuarto de siglo después los alumnos del Domingo Cáceres están rodeados de dispositivos tecnológicos durante las 24 horas del día, pero muchos de ellos apenas tienen contacto con la naturaleza. «Aquí vuelven a los orígenes, pueden trabajar la tierra, ver crecer plantas, cuidar animales», defiende Mailo corrales.

Cada recreo la huerta del instituto se llena de vida. La cabra Margarita es la estrella pero junto a ella comparten protagonismo los conejos, los pollitos e incluso los peces que surcan un pequeño estanque. «Nos podemos llevar a casa los conejos durante el fin de semana, a mí me toca pronto», decía el miércoles Celia García Corral, que tiene 13 años.

Ella es una de las alumnas que acostumbran a visitar la granja en las horas de descanso. Salvo el día de la inauguración, cuando la cabra Margarita casi muere de un síncope al verse rodeada de estudiantes deseosos de acariciarla, la vida en la explotación es relajada.

Ese rincón natural ha llamado la atención de las autoridades que visitan estos días este instituto público inaugurado hace 25 años en el corazón de Valdepasillas. Entonces se encontraba a las afueras de la ciudad, en una barriada en construcción donde abundaban los solares sin uso.

Hoy en día, el Maestro Domingo Cáceres está rodeado de edificios y sus alumnos proceden tanto de la zona centro (Luis de Morales, Arias Montano...) como de la barriada de Valdepasillas (Los Glacis, Guadiana, Santa Marina...). «Llevamos 25 promociones, por aquí han pasado muchísimos alumnos», destaca Isidro Palacios, director del centro.

La demanda siempre ha sido alta y para el próximo curso han presentado solicitud de ingreso 127 alumnos, una cifra que supera ampliamente las 90 plazas ofertadas para 1º de ESO.

El centro cuenta con cuatro líneas de Secundaria y la oferta se completa con tres ciclos de Formación Profesional: Actividades Comerciales (grado medio), Gestión de venta y espacios comerciales (grado superior) y Transporte y logística (grado superior). Estos dos últimos ciclos también se pueden realizar en la modalidad online.

Cuando Mailo Corrales compara sus primeros años en el instituto con la etapa actual valora la apuesta que se ha hecho por integrar en la enseñanza las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC'S).

Mejores instalaciones

Pero los cambios no sólo han sido tecnológicos. El centro también ha incorporado un nuevo edificio en el que se imparten los ciclos formativos, y la antigua casa del guarda acoge el departamento de orientación. «También se ha reforzado la valla perimetral para garantizar la seguridad, eso nos ha permitido erradicar los actos vandálicos que se produjeron durante una época», destaca el director.

El instituto también ha ganado en estabilidad y el porcentaje de profesores interinos se ha reducido. «Los docentes que vienen aquí quieren quedarse y eso hace que el porcentaje de interinos o en comisión de servicio apenas alcance el diez por ciento».