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Grupo de padres del Cerro Gordo que se reunieron ayer en la plaza del barrio. :: j. v. arnelas
Los padres del Cerro Gordo se organizan para pedir  la construcción de un colegio

Los padres del Cerro Gordo se organizan para pedir la construcción de un colegio

Decenas de familias han creado una plataforma a través de la cual quieren movilizar a sus vecinos para solicitar espacios educativos para el barrio

Tania Agúndez

Martes, 31 de mayo 2016, 08:50

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Unidas, organizadas y con varias medidas sobre la mesa para empezar a movilizarse. Así se encuentran las familias del Cerro Gordo, que han constituido recientemente una agrupación a través de la que quieren hacer llegar a las administraciones públicas la situación del barrio y las necesidades educativas que tiene en estos momentos. Por este motivo la asociación, que ha echado a andar hace apenas dos semanas, ha sido denominada 'Plataforma por la Educación Cerro Gordo'. Es independiente de la asociación de vecinos, aunque cuentan con el apoyo de este colectivo. «Se trata de ir sumando esfuerzos», explica Miguel Ángel Carmona, portavoz de la plataforma.

La iniciativa ha sido promovida por una decena de padres y madres que pretenden reivindicar las infraestructuras y servicios educativos para que sus hijos estén atendidos sin salir del barrio. En la primera reunión participaron alrededor de 40 personas interesadas. Ayer por la tarde se celebró otra cita a la que asistieron alrededor de medio centenar.

«A día de hoy no contamos con ninguna institución educativa pública de las proyectadas inicialmente. Cientos de niños que viven en Cerro Gordo se reparten por barriadas aledañas, haciendo que muchos colegios se desborden, como ha ocurrido en los últimos cursos en los centros de San Roque. Esto supone un problema, ya que tienen que habilitar aulas extra para atender la demanda, lo que implica que hay el mismo espacio para más niños», indica.

Lo que más les urge es la construcción de un colegio de Educación Infantil y Primaria. La Junta de Extremadura ha mostrado su compromiso de incluir este centro dentro de su Plan de Infraestructuras Educativas para los próximos años, aunque por el momento no hay fecha para las obras.

«No tenemos ninguna razón para desconfiar de su palabra, aunque en vista de lo ocurrido hasta ahora tampoco tenemos motivos para confiar en que la cumplirán. Por eso tenemos que movilizarnos ahora», apunta Carmona.

Más instalaciones

Sin embargo, esta no es la única reivindicación que pretenden trasladar a las instituciones públicas. La creación de un instituto de Secundaria y la organización de actividades educativas en el barrio son otras de las demandas que realizarán las familias implicadas en esta iniciativa. «Queremos servicios acordes con las características y necesidades del barrio en el que vivimos. Nuestra intención es convertirnos en un interlocutor que pueda trasladar las peticiones de la zona a las administraciones competentes. La principal preocupación ahora es el colegio, pero probablemente cuando terminen de construirlo se requiera un instituto ya que los niños habrán crecido», destaca.

La creación de instalaciones lúdicas y deportivas son otras cuestiones que el colectivo también tiene entre las manos. «Es importante que los niños y los jóvenes dispongan de espacios de ocio para que puedan jugar y entretenerse en su tiempo libre de una manera sana y saludable. Jugar es la mejor manera de educar», dice Carmona.

Los padres y madres que integran esta plataforma están organizando varias acciones para reclamar estos servicios. La primera la llevarán a cabo este domingo, cuando celebrarán una marcha desde Cerro Gordo hasta el centro de Badajoz.

Las primeras viviendas del Cerro Gordo empezaron a entregarse en 2008, por lo que este barrio cumple ahora ocho años de vida. Su principal peculiaridad es que es un área en la que vive gente muy joven. De hecho, buena parte de los vecinos tienen hijos pequeños. Actualmente hay más 4.000 personas censadas en el barrio. De ellas, más de 700 son niños que tienen entre cero y cuatro años. Sin embargo, desde la asociación de vecinos calculan que hay muchos más. «Manejando los datos oficiales se llena un colegio entero. Creemos que podemos ser ya más de 6.000 vecinos, lo que ocurre es que mucha gente aún está empadronada en otras zonas de Badajoz. De ellas, unos 1.000 son niños», agrega Gregorio Estévez, portavoz vecinal.

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