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El tejado del claustro detrás del fabriquero de la Catedral. :: J.V.A.
La Catedral urge el arreglo del tejado del claustro, que sufre graves goteras

La Catedral urge el arreglo del tejado del claustro, que sufre graves goteras

Las obras que se están realizando sobre la cubierta de la capilla de la Anunciación han entrado en su recta final y terminarán a mediados de diciembre

Tania Agúndez

Lunes, 30 de noviembre 2015, 07:26

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Mientras avanzan los trabajos para renovar la cubierta de la Puerta de San Blas de la Catedral, el fabriquero del templo, Gabriel Cruz, dirige su mirada a unos metros de esta zona. Pone toda su atención en las tejas viejas, rotas y ennegrecidas que resisten a duras penas sobre la techumbre del claustro. El tejado de esta galería está muy deteriorado. Además de tener piezas movidas y quebradas, no está impermeabilizado. Esta situación se convierte en un verdadero problema durante las épocas de lluvia, ya que el agua se filtra al interior del inmueble.

Esto provoca goteras y humedades en las paredes y bóvedas de los pasillos y capillas del claustro. Las pinturas que las decoran se ven afectadas por manchas y sufren numerosos desconchones. La peor parte se la lleva la capilla del Santísimo Cristo, donde la entrada de agua es más grave debido a la gran grieta que sufre la torreta que adorna la cúpula de este oratorio. El exterior de este espacio se puede contemplar en dos fotografías que acompañan a esta información. Se trata de la estancia cuadrada que sobresale al fondo del claustro en la fotografía de la izquierda y la imagen situada en la parte inferior.

El fabriquero de la Catedral teme que el estado de la cubierta en estos puntos del templo empeore y pueda causar daños al patrimonio artístico y religioso que guarda en sus salas. Por esta razón, urge el arreglo del techo del claustro. Cree que la siguiente actuación que se debe acometer es, precisamente, la reparación de la cubierta de la capilla del Cristo para evitar que se hunda.

«Hasta ahora nosotros lo mantenemos como podemos. Una vez al año, antes de que empiece a llover, se revisa la techumbre para colocar las tejas que se hayan podido mover o reponer aquellas que se han perdido, pero nuestras posibilidades económicas son muy ajustadas», explica Cruz.

Durante los años en los que las lluvias han sido abundantes el agua ha entrado en las estancias del claustro casi sin control. En esos momentos el personal eclesiástico trataba de recogerla distribuyendo cubos por la galería. Además, han retirado diversos cuadros y otras obras de arte para evitar que se estropeen por la humedad o las goteras.

Tres intervenciones

En los últimos años se han llevado a cabo tres intervenciones -la tercera se está efectuando en estos instantes- para desarrollar el proyecto de renovación de la cubierta de la Catedral.

En el 2008 se acometió un ambicioso trabajo que consistió en la restauración de la techumbre de las naves del crucero, de la nave central y de las capillas de la zona norte, la más próxima al Ayuntamiento. En aquella ocasión se renovó un tercio del tejado de la Catedral, que tiene una superficie total de 5.177 metros cuadrados.

La segunda obra se realizó el año pasado sobre el techo de la capilla del Sagrario. Con estas labores se arregló un área de 333 metros cuadrados. Con el proyecto que se está ejecutando ahora se cambiarán otros 540 metros cuadrados de la cubierta.

Cuando la nueva obra concluya este edificio histórico tendrá el 50% de su tejado preparado, y queda pendiente de reparación la otra mitad. «Falta por cambiar la totalidad del claustro, que no se ha tocado, así como una pequeña parte de la Catedral. Se trata de la capilla de Santa Teresa, la parte de la sacristía y una entrada aneja que se encuentran en muy mal estado», concreta Gabriel Cruz.

La empresa Redecoint es la encargada de llevar a cabo esta última actuación que comprende la Puerta de San Blas y la capilla de la Anunciación. Los trabajos fueron adjudicados por 207.484 euros. El 80% de la inversión está financiada con fondos Feder y el resto lo sufraga la Administración regional con fondos propios.

Las obras han entrado en su recta final y está previsto que finalicen a mediados del próximo mes de diciembre. Tras retirar las tejas de la parte de la cubierta sobre la que se está actuando, los operarios comenzaron a extender el nuevo revestimiento del techo, y tras impermeabilizar la zona colocaron el ladrillo de tejar. Estas tareas se encuentran muy avanzadas y la idea es que concluyan en unos días.

Además, durante estas semanas también se han estado restaurando las almenas y luciendo con mortero de cal las paredes interiores de la cubierta.

Aún falta por instalar un canalón para dar salida al agua de la lluvia. Igualmente, el proyecto contempla la limpieza de los demás conductos que forman parte del sistema de evacuación.

«Los trabajos han contado con seguimiento arqueológico», apunta Gabriel Cruz. De hecho, se han identificado trozos de cerámica antigua que han sido trasladados al Museo Arqueológico Provincial de Badajoz. También se han aprovechado estas tareas para destapar la abertura de varias ventanas que habían sido tapadas con el fin de conservar los huecos originales.

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