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¿Qué ha pasado hoy, 18 de marzo, en Extremadura?
Imagen de la entrada a la vivienda. :: g. c.
Organizan colectas para la familia de la casa incendiada

Organizan colectas para la familia de la casa incendiada

La vivienda en la que residían un matrimonio con seis hijos ha quedado totalmente destruida

G. C.

Lunes, 2 de marzo 2015, 08:11

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La crisis ha sido implacable para muchas familias, pero más para las que se han dedicado siempre a la construcción. Muchos años sin trabajo, ni para el padre de familia, ni para los seis hijos. Los siete forman junto a Cati, la madre, una familia de las que más sufren esta crisis.

Los ocho vivían como podían con los 400 euros de una ayuda que recibe el padre cada mes en la vivienda familiar, una vieja casa baja en el número 90 de la calle Aceuchal.

En época de bonanza, hasta pudieron construirse una pequeña nave en las afueras, donde los aperos se mezclan con un sofá y unas mesas para echar el rato en familia o con amigos. Allí era donde pasaron el domingo pasado, celebrando el cumpleaños de una de las hijas.

La sorpresa llegó cuando regresaron a casa, una casa que prendía en llamas, por un incendio originado en el comedor, a causa de un cortocircuito. La vieja construcción, con techumbre de vigas de madera, voló en pocos minutos por las llamas, que devoraron toda la casa familiar. La casa en la que nació Cati, que a sus 55 años y con seis hijos, mira la vida con deseperanza. Desde entonces, todos viven en una habitación en la nave de las afueras.

Allí están por las noches, porque por el día, los hijos, con ayuda de otros familiares, están rehabilitando como pueden la casa familiar, comenzando por los techos, que permiten todavía ver el sol ya de marzo. Y también arreglando los desperfectos que causó el incendio también en la casa contigua.

El problema ahora es que la familia no tiene dinero para pagar los materiales para acondicionar la vivienda lo suficiente para volver a vivir en ella. «Yo no quiero subvenciones, yo sólo quiero alguna ayuda para comprar los materiales para poder recuperar mi casa».

Comida quemada

Así se lamentaba Cati esta semana, que entre sollozos y nervios, pasa el día con las vecinas de toda la vida para intentar sobrellevar la situación. Y es que la desgracia se ha cebado con esta familia hasta el punto de que el incendio ha terminado también con la comida que el viernes 20 de febrero le entregó Cáritas, como cada quince días, al ser una de las familias del programa de ayuda a desfavorecidos.

Esta situación ha motivado que los vecinos y amigos se hayan puesto manos a la obra y hayan comenzado a realizar colectas para recaudar dinero para la familia. En el comercio de Loli, a tres casas de la vivienda incendiada, al día siguiente ya se podía ver la hucha para ayudar a la familia. La de la tienda del otro lado de la calle quiere organizar una gala benéfica para obtener fondos y el club de fútbol en el que juega una de las hijas, ya está organizando un partido para poder entregar el dinero de las entradas a la familia.

Las redes sociales también han comenzado a llenarse de peticiones de ayuda, la que expresa Cati con sus palabras de agradecimiento, pero también de indignación.

Las últimas, para lamentar que nadie del ayuntamiento se haya puesto en contacto con ellos y incluso ya hayan recibido la visita de un funcionario de Urbanismo, que les ha pedido que paralicen las obras en la casa porque no tienen licencia de obras municipal.

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