Almaraz será el escenario de un simulacro internacional de emergencia nuclear

La Central Nuclear de Almaraz será escenario el próximo otoño de un simulacro internacional de emergencia nuclear, por primera vez en España, en el que participarán equipos y observadores de la Unión Europea, Marruecos, Argelia, Israel y Rusia.

El director general de Protección Civil y Emergencias del Ministerio del Interior, Juan Díaz Cruz; y el delegado del Gobierno en Extremadura, Germán López Iglesias, han presentado hoy en Cáceres el simulacro, denominado 'CURIEX 2013'.

Díaz ha indicado que e último simulacro general externo se remonta al 2001, aunque debería celebrarse cada tres años.

No obstante, ha subrayado que vienen haciendo simulacros internos y parciales y pruebas de resistencia a raíz del accidente de Fukushima, en Japón.

El proyecto, que durará 15 meses, ha iniciado su primera fase que consiste en la preparación del simulacro con programas de información para implicar a la población residente.

Así, se harán campañas en centros escolares y de salud, además de implicar a los medios de comunicación locales.

En la segunda fase, en otoño, se desarrollará el simulacro, que consistirá en un accidente nuclear que provoca una fuga radioactiva a la atmósfera, y la consiguiente evacuación de la población.

En este ejercicio, que durará tres días, se intentará ser "lo más real posible", ha indicado Díaz.

En él participarán grupos de intervención de emergencia de España, Portugal, Francia, Bélgica e Italia, de los sectores radiológicos, sanitarios y logísticos, así como los miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.

En una tercera fase, que durará hasta marzo de 2014, se procederá a una evaluación para mejorar la efectividad de los planes y procedimientos de emergencia puestos en prácticas.

En esta fase participarán observadores de la Unión Europea, así como de Marruecos, Argelia, Israel y Rusia.

El simulacro afectará a la Zona 1 de Almaraz, doce municipios que reúnen una población de 5.000 habitantes.

Cuenta con un presupuesto de 600.000 euros y está financiado en un 85 por ciento por la Unión Europea.

El proyecto español se impuso a otras cinco propuestas presentadas por otros países.