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Una tienda de Menacho marca su horario y pide que se compre en el pequeño comercio. :: PAKOPÍ
Arranca la guerra por abrir los domingos
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Arranca la guerra por abrir los domingos

Actualmente se puede abrir ocho domingos al año, en 2013 se ampliará a diez y la decisión de ir a más depende de la JuntaEl Faro apuesta por la libertad de horarios, pero los pequeños comerciantes se oponen

PPLL

Sábado, 15 de septiembre 2012, 14:39

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El próximo domingo que abren los comercios pacenses es el 12 de octubre y en diciembre repetirán incluso todos los fines de semana. Se trata de ocasiones especiales ya que en Extremadura las tiendas solo pueden abrir ocho domingos al año. Ahora, sin embargo, se ha desatado la guerra y el objetivo final es conquistar todos los domingos del año. Es decir, pasar de 8 a 48 con las puertas abiertas.

A favor está, por ejemplo, el nuevo centro comercial El Faro que pretende abrir los siete días de la semana y en contra, los pequeños comerciantes que creen que la medida solo beneficia a las grandes superficies.

La chispa de este fuego la prendió hace unos meses el nuevo Real Decreto aprobado por el Gobierno de Madrid sobre horarios comerciales. Esta nueva normativa amplia el número de domingos que se abren a mínimo 10 al año (pueden ser más) y el horario de las tiendas a 90 horas semanales. Se trata de un primer paso hacia la liberalización de horarios, es decir, que los empresarios abran siempre que quieran aunque no llega a dar libertad del todo. Eso sí, con este decreto en marcha las comunidades autónomas tienen mucho que decir.

Por esa razón el fuego se desató del todo este jueves en la inauguración del centro comercial El Faro. Los responsables de la empresa promotora del proyecto, Unibail Rodamco, confesaron que les encantaría poder abrir los domingos y minutos después, el presidente de la Junta de Extremadura, en su discurso, admitió que su Gobierno está a favor de la liberalización.

Estas declaraciones sirven de apoyo al centro comercial, pero han desatado grandes críticas entre los pequeños comerciantes y las asociaciones empresariales de la región que creen que los domingos que se abren actualmente ya son suficientes e incluso aceptan subir de 8 a 10 tal y como ha establecido el nuevo Real Decreto.

Eso sí, no quieren ir más allá. José María Reino, presidente de Fecoba (Federación de Comercio de la Provincia de Badajoz), dice que los 10 días y las 90 horas «las tenemos que aguantar salvo que prosperen los recursos de inconstitucionalidad». Pero abrir más domingo es impensable para este representante. «En octubre se reúne el Consejo de Comercio y esperamos que se aprueben los 10 días y nada más. Después paulatinamente la Junta puede subir hasta 16», admite Reino, pero espera que no se concrete esta subida. «Hace mes y medio los sindicatos, las asociaciones de empresarios y los consumidores pedimos que no subieran más y esperamos que se respete».

Para Emilio Doncel, de la Federación de Asociaciones de Comercio de Extremadura y presidente de la Asociación de Comerciantes de Menacho, abrir más días puede ser letal para el pequeño comercio. Por esa razón explica que los comerciantes locales han pedido una reunión con la concejala delegada de Comercio en el Ayuntamiento, María José Solana. «Para dejarlo todo claro». Sin embargo el Consistorio, consultado por HOY, ha matizado que por el momento solo se aplicará la subida que marca la ley y que en el futuro decidirá el Gobierno de Extremadura si se liberaliza el horario.

En efecto, la Junta de Extremadura aún tiene mucho que decir en este asunto aunque el Decreto Ley sea nacional. Se debe a que esta norma cuenta con una excepción que podría afectar a Badajoz. En concreto permite a las ciudades de carácter turístico o fronterizo que liberalicen sus horarios. Es el caso, por ejemplo, de Madrid, Valencia o Barcelona. En este punto la capital pacense podría defender su entrada en la lista por su carácter internacional, ligado a Portugal.

Badajoz, ¿la excepción?

José María Reino lo descarta porque considera absurdo comparar Badajoz con las ciudades de la lista. Por su parte Emilio Doncel defiende que, para ser considerada una zona turística, hay que contar con 400.000 pernoctaciones o un millón de visitas flotantes y que Badajoz no cumple estas características.

A pesar de los argumentos, ambos representantes temen que se aplique una excepción en la capital pacense y más tras conocer la opinión del presidente de la Junta que dejó claro su apoyo a la liberalización.

«Los políticos en lugar de dar su opinión personal deberían consultar a los afectados. En Badajoz hay 2.600 comercios minoristas (frente a un millar mayoritarios) y en total en Extremadura hay 16.000 minoristas que pueden cerrar por estas medidas y de los que dependen muchas familias. Además no son de fuera, todo lo que produce se vuelve a reinvertir en la zona».

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