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¿Qué ha pasado hoy, 27 de marzo, en Extremadura?
La casa 'okupa' de Cáceres no dura ni doce horas tapiada
POR ORDEN JUDICIAL

La casa 'okupa' de Cáceres no dura ni doce horas tapiada

Aunque los accesos a la vivienda se habían cerrado esta mañana, los 'okupas' han vuelto a entrar en el edificio.

SERGIO LORENZO | HOY.ES

Jueves, 18 de marzo 2010, 21:22

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Si a las ocho y media de esta mañana funcionarios judiciales acompañados por agentes de la Policía Nacional desalojaban y tapiaban la casa 'okupa' de la calle Camino Llano, a lo largo del día los indigentes desalojados han abierto un boquete para acceder a su interior. La Policía ha tenido que desalojar de nuevo el edificio, del que esta mañana ya habían salido once indigentes. Todos son los que habitualmente están en el parque de Calvo Sotelo, entre ellos el popular Manolo Winston.

Está previsto que la casa limpie la semana próxima de toda la suciedad del interior: ropa, mantas, bolsas

Los vecinos de la calle Camino Llano se mostraban ayer satisfechos, al ver solucionado este problema con el que estaban conviviendo desde hace más de un año.

La casa de dos plantas era usada por indigentes que llegaron incluso a poner un candado en la puerta y controlar el acceso al edificio. Sin embargo, en los últimos meses, según los vecinos, la puerta principal estaba abierta y llegaban a convivir hasta 25 personas sin luz y agua.

El propio dueño de la casa volvía a pedir este mes el desalojo por orden judicial, en un nuevo paso desde que se enteró de su ocupación. El 25 de abril del 2009 presentó la denuncia ante la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Cáceres, y que entonces se abrieron diligencias penales en el Juzgado de Instrucción número 2 de Cáceres. El 30 de julio de 2009 amplió la denuncia por los desperfectos que estaba sufriendo la casa y las molestias a los vecinos. Los okupas habían provocado un incendio y él pidió en el Juzgado el desalojo inmediato de su casa, en el que volvía a insistir este mes.

El incendio se produjo a mediados de julio del año pasado, tras arder un colchón. Sin embargo, no es la única vez que el número 18 saltó a los medios de comunicación. En abril, una indigente se cayó desde un balcón cuando trataba de acceder al interior desde la fachada. Por aquel entonces, sí estaba el candado en la puerta que permitía a los okupas controlar quien entraba.

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