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Ignacio Buqueras, en su conferencia de ayer. / BRÍGIDO
Extremadura es una región «ideal» para implantar horarios más europeos
VARA QUIERE MÁS EFICACIA SIN ALARGAR LA JORNADA LABORAL

Extremadura es una región «ideal» para implantar horarios más europeos

Por el pequeño tamaño de las ciudades y un clima que varios meses al año invita a trabajar menos horas por la tarde Vara quiere más eficacia sin alargar la jornada laboral

J. L. A.

Miércoles, 20 de mayo 2009, 16:10

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Entrar a trabajar a las ocho de la mañana, comer a la una, volver al trabajo a las dos y salir a las cinco. Horario laboral europeo, el más eficaz porque permite a las personas una vida más agradable al salir temprano de la empresa y poder dedicar tiempo a la familia, aficiones y a uno mismo.

Por España viaja desde hace seis años predicando este cambio Ignacio Buqueras, un empresario catalán que se dio un día cuenta de que los españoles pasan demasiado tiempo en el trabajo pero no consiguen la eficacia productiva del resto de europeos.

Preside la 'comisión nacional para la racionalización de los horarios españoles y su normalización con los demás países de la UE', enviando cartas a políticos, dirigentes empresariales y sindicales, y dando charlas y jornadas de sensibilización para toda la sociedad.

Todos están de acuerdo en que tiene razón, pero ¿quién le pone el cascabel al gato?

Ayer hizo escala en Mérida donde presentó por la tarde una jornada que inauguró el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara.

Eficacia, no tiempo

Buqueras, al que el presidente llamó «apóstol» y el alcalde Ángel Calle «predicador», pregona un uso adecuado del tiempo, mediante el reparto de la jornada de 24 horas en ocho para trabajar, ocho para descansar (dormir) y otras ocho para disfrutar y vivir.

Dependiendo del buen uso, o no, de un tiempo que es limitado «seremos más felices y eficaces, y haremos felices a los nuestros» o estaremos «más frustrados».

Cuando España entera busca un nuevo modelo económico productivo para superar la crisis del ladrillo y el adiós al crédito barato y abundante, Buqueras advierte que la solución no es echar más horas -«el hombre tiene un límite físico y psíquico» - sino laborar con más eficacia para ser más competitivos.

Hay que trabajar «por objetivos», con el apoyo tecnológico «adecuado», y estar «concienciado» con el trabajo que se hace. Aquella persona que se encuentra a gusto en la empresa, «que ve y le explican, hay diálogo», es la más rentable, pero la que «entra a una hora y no sabe a la que va a salir, aguanta, pero ni es buena para ella ni para la empresa».

Buqueras critica el vicio del «presentismo» que es procurar no irse del trabajo antes que el jefe, y resulta a su juicio «tercermundista, puro feudalismo».

Extremadura ofrece a su juicio unas condiciones ideales para ser un referente en España si se atreviera a cambiar los horarios. Porque el tamaño de las ciudades es pequeño, no exigen grandes desplazamientos, y salir pronto del trabajo permitiría aprovechar mejor el tiempo y la «gran calidad de vida»; además durante varios meses al año las temperaturas altas invitan a recortar la jornada laboral por la tarde.

«El tiempo es oro, y aquí en Extremadura una maravilla».

Vamos al revés

Guillermo Fernández Vara, presidente de la Junta de Extremadura, coincide en la crítica de que los españoles tienen horarios europeos para levantarse, abandonan pronto la cama, pero españoles para acostarse, lo hacen tarde. El dato estadístico es que cada español duerme 53 minutos menos que la media europea.

Cambiar esto supondría una «revolución». Los males de los españoles empiezan por la noche, acostándose tarde, muchas veces por la televisión. El presidente confiesa tener problemas con su hijo de 14 años para que se acueste temprano porque programas juveniles como 'Física o Química' y 'Los hombres de Paco' acaban pasada la medianoche.

Habría que cambiar horarios, programación de TV, el modelo de vida... «Lo nuestro», añade Fernández Vara, «es algo contra lo que es difícil luchar y que cada día es más complicado».

La falta de puntualidad, el ir directamente a la segunda convocatoria de las reuniones, las esperas institucionalizadas a los 'superiores' (profesores, jueces, médicos) dificultan ese aprovechamiento del tiempo. Un problema que «hay que tomar en serio» porque la tendencia «no lleva a nada positivo».

Para colmo la atención a Internet tras la jornada laboral (consultar el correo, blogs, etc.) ha prolongado la jornada personal, apunta Vara, que aunque difícil cree que se puede conseguir igual que se consiguieron cosas aparentemente imposibles como prohibir fumar en los edificios públicos.

«No se produce más por estar más horas en el trabajo, el rendimiento baja», conviene el presidente regional.

Fernández Vara se apunta a abrir una «reflexión» sobre todo esto para buscar en la Administración autonómica una mayor eficacia sin aumentar el número de horas, y eso pasa por «poner en valor el tiempo».El pluriempleoIgnacio Buqueras considera que tras la Guerra Civil los más pobres tuvieron que buscarse más de un empleo para sacar a sus familias adelante y este pluriempleo tiene la culpa de que en España no se tengan horarios europeos.

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