Borrar
Directo Directo | La intensa lluvia en Cáceres para la procesión de los Estudiantes
FUTBOL

Ellas también quieren contrato

El Club de Fútbol Femenino de Cáceres encabeza una cruzada para conseguir que las mujeres puedan jugar como profesionales

C. M. C.

Miércoles, 18 de marzo 2009, 11:53

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

En España no es posible que una mujer, por muy bien que juegue al fútbol, pueda convertirse en profesional y vivir legalmente del deporte que ama. Hay pocas jugadoras que perciban una cantidad de dinero significativa, y las que lo hacen se ven obligadas a buscar subterfugios, como contratos por entrenar a las categorías inferiores, o gratificaciones en concepto de gastos. No tienen derecho a Seguridad Social ni a la protección laboral mínima que proporciona un contrato, y todo porque los estatutos de la Federación Española de Fútbol excluyen a las mujeres de la práctica profesional de este deporte. En los tiempos que corren resulta a todas luces anacrónica esta situación, y ha sido un equipo extremeño, el Club de Fútbol Femenino Cáceres, del Grupo V de la Primera División, el que ha tomado el estandarte de la lucha por conseguir igualdad de derecho con los hombres en el mundo del fútbol, uno de los pocos reductor que le quedan al machismo para campar a sus anchas. La presidenta del club, María Jose López, es abogada especialista en Derecho Deportivo, y ha elaborado un informe sobre la situación actual a la que se enfrenta el fútbol femenino por la imposibilidad de que las jugadoras sean profesionales. «Se está enviando a todas las instancias que tienen algo que decir en el asunto, como pueden ser el Consejo Superior de Deportes, la Federación Española de Fútbol, la Liga de Fútbol Profesional o el Ministerio de Igualdad», afirma Alberto Montes, vicepresidente del equipo, quien señala además que no están solos en esta lucha. Hay otros equipos, como el Atlético de Madrid, con el que las cacereñas tienen un contrato de colaboración, que llevan años reivindicando la igualdad de derechos, aunque por el momento con escasa fortuna. Apoyo extremeño Alberto Montes asegura, no obstante, que las cosas están empezando a cambiar. La Liga de Fútbol Profesional va estudiar el asunto en breve, y cuentan con el total apoyo de las instituciones extremeñas, tanto del Ayuntamiento de Cáceres como de la Consejería de Igualdad y Empleo de la Junta. «Extremadura es un ejemplo nacional es este tema, pues es la única comunidad en la que las niñas y los niños pueden jugar juntos en el mismo equipo hasta el primer año de cadete», señala Montes. Una de las principales motivaciones que tiene el Club Femenino Cáceres para emprender esta cruzada es allanar el camino para sus jugadoras, compuesta en un 60 por ciento por chicas de 14 a 16 años, dos de las cuales, Marina García y Selena Alegre, forman parte de la Selección Española sub 17 y sub 16, respectivamente. También Eva Montes ha sido convocada en alguna ocasión con la sub 16. Son niñas que ambicionan dedicarse algún día profesionalmente a jugar al fútbol, algo completamente habitual para los chicos de su edad, pero que con la actual normativa a ellas les está vedado. Además el sistema está montado de tal forma que no hay nadie que defienda sus intereses. Podría hacerlo la Asociación de Futbolistas, a la que no pueden pertenecer precisamente por no ser profesionales, de modo que es el problema de la pescadilla que se muerde la cola. La propia FEF establece en sus estatutos que nadie podrá ser discriminado por razón de sexo, pero al mismo tiempo no contempla la posibilidad de que haya mujeres futbolistas profesionales. «Es evidente que aquí hay una discriminación, pero ocurre lo mismo que pasó con el Caso Bosman, que hasta que él no dio el primer paso la situación no se normalizó», explica Montes, quien recuerda en este sentido que ningún artículo federativo puede ir contra una norma superior como la Ley de Igualdad o la misma Constitución.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios