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C. N. N.
Jueves, 12 de marzo 2009, 11:21
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Paz en el Womad. Entendimiento y sonrisas que le garantizan larga vida y que parecen hacer olvidar los truenos y las centellas habituales en las negociaciones de esta cita musical, que este año cumple dieciocho años en Cáceres. Ayer se presentó su cartel definitivo, a dos meses de su celebración, un margen amplio y también inédito porque las desavenencias entre la administración y la organización -el Consorcio Gran Teatro, que forman varias instituciones públicas- llevaban sistemáticamente las negociaciones hasta el último momento. El año pasado se supo sólo con quince días lo que iba a haber. Este año, después de que en 2008 la cita de Peter Gabriel estuviera a punto de desaparecer en Cáceres, todo parece ser distinto, para alivio de casi todos. «Después de una negociación bastante dura», dijo Leonor Flores, la intención es que el festival se estabilice. «Continuar siempre ha sido nuestro deseo», resaltó la consejera de Cultura, que acompañó a la representante de Womad en España y Portugal, Dania Dévora, en la presentación del macrofestival, que se extenderá del 7 al 10 de mayo con su formato más habitual y un menú de 24 artistas de cinco continentes. 21 actuarán y cuatro impartirán talleres. Brilla el cubano Eliades Ochoa, que repite. Dévora reconoció «los caminos difíciles» por los que ha transitado Womad en Cáceres en estos 18 años, pero también asumió como normal que los responsables políticos demandaran las mejoras que crisparon el año pasado la negociación del festival. En resumen, que una parte y otra parecen haberse adentrado por caminos menos espinosos y hablan de momentos «ilusionantes». Si todo sigue como hasta ahora, el compromiso que se alcanzó el año pasado de prorrogar la cita durante al menos dos años, continuará. Hay gestos que han gustado a Cultura, como que el grupo extremeño Acetre actúe el 25 de julio en el Womad de Londres. También el asunto del sonido, una preocupación constante que, según dijo Dévora, mejoró el año pasado en la Plaza pero sobre el que se seguirá trabajando. Anunció además que, por primera vez, en los carteles, Womad y Cáceres apareceran unidos. El presupuesto es exactamente el mismo que el año pasado, poco más de medio millón de euros. Es de las pocas citas musicales con financiación pública que no recortarán su presupuesto en 2009. El programa El programa ofrece el enfoque al que siempre ha sido fiel este festival. Hay algunos nombres conocidos e identificables por un público más o menos informado, como Ochoa, los colombianos Aterciopelados, la cantaora flamenca Mayte Martín o el artista de Mali Salif Keita, pero también un buen puñado de formaciones representativas de sus países, desconocidas para los profanos. Entre ellos, los también malineses Amadou & Mariam y Smod, el francés Hindi Zahra o el israelí Mor Karbassi. Rumanía, Eslovenia y Serbia estarán representados por Paprika Balkanicus, y el Reino Unido por Rachel Unthank and The Winterset. África se completa con las presencia de Seckou Keita Quarter, BLK JKS, Víctor Deme y Toumast, que proceden de Senegal, Suráfrica, Burkina Faso y el Sáhara. Componen, entre todos, la habitual batería de música multicultural, verdaderas sorpresas en muchos casos. Las formaciones nacionales son DePedro y La Shica, además de Mayte Martín. Extremeños La presencia de grupos extremeños, otra de las antiguas reivindicaciones por parte del Consorcio, está más que garantizada. La Alambiqueña del Oeste, Arlos Ojeda, Inlavables, Laura (que puede ser la nueva Bebe, señaló Dévora) y manantial Folk ocuparán los escenarios del festival, que se ubicarán en Las Veletas, San Jorge y la Plaza Mayor. Se prescinde este año del Gran Teatro, al intentar que el mayor número posible de público disfrute de las actuaciones, que durarán hasta las doce de la noche el jueves, y hasta las dos y media y tres y media de la mañana el viernes y sábado. Habrá mercado global y comidas del mundo, una actividad que se retomó el año pasado, y talleres para niños. Hay una actividad nueva, un ciclo de cine africano en colaboración con la Casa de África. Así será el Womad de la mayoría de edad, que parece superar la inestabilidad de sus años adolescentes.
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