El nuevo jardín de la Zona Norte tendrá áreas de mini golf, juegos y merenderos

No se trata de una zona verde al uso. No será un simple jardín y poco tiene que ver con la idea del anterior Gobierno local de construir un botánico en ese espacio. La actuación que ha empezado a desarrollar la Escuela Taller 'Cauce' en la Zona Norte va a generar una singular área verde, lúdica, deportiva y recreativa en algo más de 26.400 metros cuadrados. En ese espacio, que ahora ocupa un terreno baldío, lleno de maleza, sin apenas árboles y con más de un banco roto, frente al cementerio municipal, habrá dentro de año medio un campo de mini golf, de 9 hoyos, una zona de juegos infantiles, otra deportiva, merenderos y un circuito saludable para los que quieran aligerar grasas sin un excesivo esfuerzo físico. Todo en 26.400 metros cuadrados donde, obviamente, habrá más árboles y plantas aromáticas. «Es un proyecto muy interesante. En el plano laboral, va a resultar una excelente oportunidad para que los chicos aprendan a trabajar en su especialidad», subraya Beatriz Pérez Bustamante, directora de la Escuela Taller. Hace seis meses, la escuela echó a andar y tras medio año de formación exclusivamente teórica ha llegado el momento de pasar de la aula al terreno de trabajo. En concreto, al parque de la Zona Norte. «Se va cumpliendo lo que está fijado en el proyecto. Durante los primeros seis meses, los alumnos han recibido formación teórica y ahora la van a compatibilizar con la práctica, en marcha desde el 30 de diciembre. La actuación del jardín de la Zona Norte es un ejemplo de ese trabajo que va a resultar muy provechoso para los alumnos y para la ciudad, recalca Pérez Bustamante, quien subraya que, en total, 60 alumnos, repartidos en cuatro especialidades (albañilería, jardinería, mantenedor de edificios y arqueología) forman parte de la Escuela Taller. Gracias a los que estudian, y ahora trabajan, albañilería y jardinería se va a poder realizar un jardín especial. Por su tamaño y por su división en numerosas y variadas áreas. «No va a ser el típico parque de árboles y bancos. El proyecto va mucho más allá», incide la responsable de la escuela emeritense. Detalles Lo más novedoso, sin duda, pasa por la habilitación de una zona, que ocupará un espacio aproximado de 1.300 metros cuadrados, para jugar el mini golf, que se jugará en un circuito donde habrá 9 hoyos. A medio camino entre lo atractivo y lo práctico, la Escuela Taller ha incluido esta actuación dentro de un proyecto en el que, originalmente, no aparecía. Próximo a ella, estará una zona 'pipican', cada vez más demandada por los ciudadanos, sobre todo en ese punto de expansión urbanística de la capital autonómica. El nuevo jardín de la Zona Norte, que tendrá cuatro accesos, recogerá también una zona de descanso y, en concreto, una zona de juegos, contando con dos pistas de petanca, y una zona de recreo con mesas de picnic, merenderos que ocuparán casi 400 metros cuadrados de superficie. Para los niños, el área de juegos infantiles es de 650 metros cuadrados. Árboles Además de esta infraestructura, se intervendrá para colocar una boca de riego y aspersores de plástico, que regarán, por goteo, los espacios en los que haya césped natural, árboles y arbustos. En concreto, los alumnos de la Escuela Taller están plantando árboles como pinos, acacias, plataneras, cedros, olmos o copas, mientras que se establecerán plantas aromáticas. Está previsto que a lo largo del jardín se sitúen una serie de placas informativas haciendo referencia a las cualidades de esas las plantas y árboles. Se trata así de realizar también una labor didáctica entre todos sus potenciales visitantes. El entorno estará cuidado por traviesas de madera, papeleras y bancos ajustados a este espacio (de 1,70 metros de longitud). El proyecto contempla también dejar una zona del jardín con menos plantación para que en un futuro a corto o medio plazo se pueda ampliar con más áreas de juegos infantiles, áreas deportivas, áreas de mantenimiento para personas mayores. En el espacio que se ha empezado actuar se han realizado en años anteriores algunas actuaciones, fundamentalmente el cerramiento del recinto, una pequeña pasarela de madera -muy deteriorada- en el paseo central, una pequeña nave para guardar las herramientas de trabajo y un movimiento de tierras con el que se pretendió dar una homogeneidad a un terreno con ligera pendiente norte-sur. Del mismo modo, el parque tiene ya una conexión a la red de abastecimiento de agua.