Quien coge, paga

De Berrocalejo se ha hablado y escrito más en los últimos años que en toda su historia, gracias al complejo turístico y de ocio Marina Isla de Valdecañas que se construye en dirección a El Gordo y la autovía de Extremadura. Es un pueblo pequeño y acogedor, de menos de 100 habitantes, situado casi en el límite de las provincias de Cáceres y Toledo, que ofrece unas magníficas vistas al pantano de Valdecañas. En su término municipal se encuentra Peñaflor, un espectacular conjunto pétreo a orillas del río Tajo muy conocido por los senderistas de la zona y hasta donde el Ayuntamiento organiza una marcha cada primavera. Su entorno también es muy apreciado por los aficionados a la recogida de espárragos de esta parte de la región y de las poblaciones de Toledo más próximas, ante la abundancia de ejemplares y la frecuencia con la que salen. «Es raro el día que vas y no te traes un manojito para una tortilla», señala un vecino de Navalmoral de la Mata que suele 'escaparse' con frecuencia. Novedoso reglamento A partir de ahora esa tortilla le costará, al menos, 3 euros, que es la cantidad que deberá abonar al día cualquier persona que vaya a coger espárragos para consumo familiar a Peñaflor y a cualquier monte público del término municipal de Berrocalejo. A esa cantidad hay que añadirle tres ceros para quienes destinan lo recogido a la venta, ya que entonces deberán pagar 3.000 euros por toda la temporada. Ambas cantidades, así como las sanciones que se aplicarán si no se abonan, figuran en el reglamento de recogida de espárragos aprobado por el Ayuntamiento y que ha entrado en vigor esta semana una vez publicado en el Boletín Oficial de Cáceres. «No pretendemos que la gente no venga, ni mucho menos. Pero sí que se dejen algún dinero en los bares o en las tiendas. Porque tampoco parece justo que vengan, se lleven los espárragos y no dejen ningún beneficio al no pisar prácticamente en el pueblo», asegura el alcalde, Evelio García Breña, al defender el reglamento, que debe ser el primero de la región que regula la recogida de espárragos y que está inspirado en el que elaboró años atrás el Ayuntamiento de Jarandilla de la Vera para la recogida de setas. El objeto es -según dice la propia normativa- la ordenación y regulación de la recolección de espárragos en los montes públicos del municipio. De tal manera que únicamente se autorizará la recogida a aquellas personas que cumplan con los requisitos que figuran en el mismo. Si es para consumo familiar se permitirá un máximo de 3 kilos por persona y día, siendo necesaria una autorización individual que se expedirá de lunes a viernes en el Ayuntamiento y los fines de semana en bares y tiendas, y por la que se abonará 3 euros. Espárragos para la venta La autorización es mucho más costosa cuando los espárragos que se recogen se ponen a la venta. Y parece que son bastantes quienes lo hacen, ya sea en mercadillos o en tiendas del entorno, que además de abonar 3.000 euros por temporada «habrán de reunir las condiciones y requisitos exigidos por la normativa reguladora del producto y disponer del carnet de manipulador de alimentos». Las personas interesadas en la obtención de esa autorización 'comercial' deberán solicitarlo en el Ayuntamiento en el modelo establecido al efecto, quedando sometida su concesión a la comprobación previa del cumplimiento de los requisitos legales en vigor. Incluso podrán ser revocadas cuando se cometan infracciones en materia de defensa del consumidor y de la producción agroalimentaria. El reglamento también incluye una serie de prohibiciones, encaminadas, fundamentalmente, a la conservación del entorno, como son encender fuego fuera de la época y lugares autorizados, la corta indiscriminada de ramas y otras especies arbóreas, el mal uso de los caminos públicos, cañadas y veredas o el vertido y abandono de objetos y residuos fuera de los lugares permitidos. Agentes competentes Como todo reglamento que se precie, el de la recogida de espárragos de Berrocalejo también contempla sanciones para quienes incumplan alguna de las normas establecidas. Entonces los 'agentes competentes' podrán proceder a la retirada definitiva de la autorización y a proponer al alcalde la imposición de multas que oscilarán entre 300 y 3.000 euros. Y es ahí donde surgen las dudas. ¿Pondrá el Ayuntamiento personal de vigilancia para controlar la recogida? ¿Se encargará de ese cometido la Guardia Civil?. Se irá viendo con el paso de las primeras semanas de aplicación de la normativa, puesto que la temporada está a punto de empezar, para prolongarse la mayor parte de la primavera.