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Trece detenidos en el mayor golpe contra el narcotráfico de los últimos dos años
REGIONAL

Trece detenidos en el mayor golpe contra el narcotráfico de los últimos dos años

Noventa agentes de la Guardia Civil registraron de forma simultánea ocho viviendas de Badajoz, donde encontraron droga y una gran cantidad de dinero Los agentes podrían haber localizado una caja fuerte en la que se guardaban más de 300.000 euros

E. F. V.

Sábado, 15 de diciembre 2007, 12:00

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Los vecinos del Casco Antiguo de Badajoz se despertaron ayer más temprano que de costumbre. Poco antes de las siete de la mañana resonaron en el silencio de la madrugada varios golpes secos y, acto seguido, una voz recia clamó por tres veces: «Abre la puerta». Ése fue el inicio de la redada antidroga que culminó con el registro de ocho viviendas y la detención de trece personas.

La Delegación del Gobierno en Extremadura confirmó horas después que el despliegue había sido llevado a cabo por 90 agentes de la Guardia Civil, un nutrido batallón policial en el que asumieron buena parte del protagonismo los casi 40 componentes del Grupo Rural de Seguridad (agentes antidisturbios) llegados desde Sevilla.

Mucho antes de que amaneciera los guardias se reunieron en la Comandancia de la Guardia Civil de Badajoz, donde los responsables del dispositivo dieron órdenes precisas para que cada grupo de agentes tuviera claro cuál era su objetivo.

Esa planificación hizo posible que los registros se llevaran a cabo de forma simultánea en ocho calles distintas de la ciudad, un sistema de actuación que cogió por sorpresa a los ocupantes de los domicilios investigados.

Una de esas viviendas se encuentra en la calle Regulares Marroquíes del Casco Antiguo, en un inmueble próximo al solar donde estuvo la antigua sala de fiestas Charlot. En ese lugar los agentes llegados desde Sevilla utilizaron un ariete para reventar la puerta, un modo de actuar que se repitió en otro edificio situado frente a la parroquia de San Agustín.

La contundencia de la Guardia Civil fue considerable y en un abrir y cerrar de ojos tenía controlada la situación en todas y cada una de las viviendas donde se presumía que pudiera traficarse con droga.

Tras esos momentos iniciales comenzó el trabajo del Grupo Cinológico de la Guardia Civil, cuyos perros de rastreo pusieron a prueba sus olfatos en un ejercicio real de búsqueda de droga, empeño al que también se sumaron los agentes rebuscando hasta en el último rincón.

De momento se desconoce qué cantidad de estupefacientes fue localizada, pero todo hace suponer que se trata de un alijo importante, a juzgar por la satisfacción que transmitían las caras de los agentes que participaron en la operación.

Mucho dinero

En la nota oficial sólo se aclara que esta actuación contra el tráfico de drogas se ha saldado hasta el momento con la detención de trece personas (al menos cuatro eran mujeres) y la intervención de droga, dinero, numerosos efectos y documentación.

Testigos presenciales pudieron ver cómo los agentes de la Guardia Civil sacaban de algunas de las casas pantallas de plasma de un valor elevado, equipos musicales y otros aparatos que podrían denotar el alto nivel de vida de los detenidos.

Esos mismos testigos añadieron que la Guardia Civil también se llevó una caja fuerte y una fuente conocedora del caso añadió que esa caja de caudales podría guardar una cantidad sustancial de dinero. Tanto, que se especula con la posibilidad de que la suma total pudiera superar los 300.000 euros, un extremo que no ha podido ser confirmado por decretarse el secreto de sumario.

Ese dinero, al igual que el resto de las cantidades intervenidas, podrían tener un papel importante en la investigación, proceso que también tendrá en cuenta el empeño que puso uno de los detenidos en desprenderse de un sobre en el que se guardaban varios fajos de billetes. El sobre en cuestión fue arrojado a una vivienda anexa a la suya y la Guardia Civil tardó en recuperarlo, puesto que la casa se encontraba abandonada y tuvieron que pedir autorización para penetrar en su interior.

Plaza de San Andrés

Aunque la Delegación del Gobierno no ha aclarado aún dónde se realizaron los registros, está confirmado que tres fueron en el entorno de la Parroquia de San Agustín y el Colegio San Pedro de Alcántara (calles José Lanot, Regulares Marroquíes y José Terrón).

Otro de los pisos investigados se encuentra en la ronda del Pilar, frente al edificio administrativo de Los Pinos, y también hay otros dos inmuebles en los alrededores de la plaza de San Andrés, uno en el entorno de la calle Bravo Murillo y otro en la zona de la calle Doblados.

En esta parte de la ciudad el dispositivo de seguridad fue muy visible y los vecinos observaron con gran sorpresa cómo los agentes cortaban al tráfico la mayoría de las calles que rodeaban a la plaza de San Andrés para evitar la huida de los posibles narcotraficantes.

El responsable de un supermercado cercano explicó que los agentes comenzaron a llegar en torno a las 7 de la mañana y que no se marcharon hasta bien entrado el día.

La última zona en la que actuaron los agentes de la Guardia Civil se sitúa en la barriada del Gurugú y, más concretamente, en la zona de La Luneta, un lugar de casas bajas al que también llegaron los registros.

De momento está confirmado que todo el dispositivo tiene relación con una operación contra el narcotráfico que ha sido dirigida desde el Juzgado de Instrucción Número 2 de Badajoz. La titular de esa instancia judicial ha decretado el secreto de sumario por lo que no han trascendido los detalles de una operación que podría asestar un golpe mortal a una red dedicada a la distribución de droga en Badajoz, sus poblados y otras localidades próximas.

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