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¿Qué ha pasado hoy, 27 de marzo, en Extremadura?
La tendencia al alza en los malos resultados académicos persiste desde 1998. / HOY
La mitad de los extremeños de 15 años repite curso
REGIONAL

La mitad de los extremeños de 15 años repite curso

Las claves: falta de inversión, inestabilidad del sistema y aumento en la edad de escolarización. La tendencia crece al alza desde 1998 pese a los esfuerzos

ARACELY R. ROBUSTILLO

Domingo, 30 de diciembre 2007, 13:16

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A Tamara le gusta bailar, salir de marcha con sus amigas, pasar tiempo con su novio y el flamenco, en especial 'El Barrio'. Los estudios... No tanto, pero sabe que son necesarios para su futuro: quiere ser secretaria. Tiene 19 años y repite segundo de bachillerato en el I. E.S. San Roque de Badajoz, aunque esta no es su primera vez. Cuando se le pregunta por su fracaso escolar esta pacense lo tiene muy claro: «No son los alumnos, ni los profesores, son las asignaturas».

Esta pacense pone cara y apellidos a los últimos datos que publica el Ministerio de Educación: un 40,7% de las chicas extremeñas de 15 años repitió curso en el 2005-2006 y un 55,3% de los chicos de la misma edad hicieron lo propio, ilustrando así una cifra media (48,35%) que nos sitúa por encima de la media española 42,3%.

Los implicados apuntan a diferentes causas y explicaciones para entender un incremento que se ha ido consolidando en los últimos años: la falta de inversión, el aumento de la edad de escolarización obligatoria hasta los 16 años, la inestabilidad del sistema educativo, la dispersidad geográfica extremeña, el elevado número de alumnos por aula o la falta de incentivos del mercado laboral son algunos de los argumentos. Los picos alcanzados en el curso 2005-06 llaman a reflexionar sobre qué porcentaje de repetidores sería necesario para cuestionar el funcionamiento de un método que para muchos 'hace aguas'.

Felipe Gómez Valhondo, director general de Política Educativa de la Junta de Extremadura, considera, sin embargo, que el hecho de que un alumno repita curso no es indicativo de fracaso escolar.

La cuestión económica parece ser clave para todos y los datos lo avalan: a mayor inversión, mejores resultados académicos. Esta máxima, no obstante, no parece cumplirse en todos los casos ya que Extremadura, pese a ser la comunidad autónoma que más dinero invierte en educación con respecto a su PIB, se encuentra en uno de los puestos de cabeza con respecto al número de repetidores.

Actuaciones

Gómez Valhondo pormenorizó que, a nivel regional, existe una intervención educativa para mejorar los resultados en 227 centros, de manera que están cubiertos el 40% de los de Primaria y el 45% de Secundaria. La Administración asegura que está actuando en 94 de ellos a través de programas de apoyo y refuerzo educativo, en quinto y sexto de Primaria, y en primero, segundo y tercero de Secundaria. Además se ha puesto un refuerzo en los dos últimos cursos de Primaria, dentro del horario lectivo, en 48 centros. Por otra parte, en las áreas instrumentales, lengua y matemáticas, en horario extraescolar, se han puesto programas de apoyo en otros 85.

Para Adrián Vivas, secretario general del sindicato CSI-CSIF es igualmente clave la inestabilidad de un sistema que él califica de preocupante: «¿En qué otro país del mundo ha habido cinco leyes educativas en 15 años?. Cuando voy a visitar a los compañeros muchos profesores no saben si los criterios de evaluación a aplicar ese curso son ya de la LOE, la LOGSE o la LODE», subraya.

Este profesor de Secundaria incide también en el tema de la ratio y declara que la enseñanza personalizada, a la que se debería aspirar, es imposible debido al elevado número de alumnos que hay por clase. Este punto de vista entra en conflicto sin embargo con las cifras que apunta Felipe Gómez Valhondo, que asegura que en Extremadura hay, en la actualidad, un profesor por cada 10 alumnos.

Ellas y ellos

En el trasfondo sociológico se da el hecho de que en la región las repeticiones se producen más entre chicos (55,3%), que en chicas (40,7%) de 15 años. El sociólogo Artemio Baigorri defiende que las cifras ilustran que las jóvenes de esa edad ya saben que, con el mismo nivel de estudios, encontrarán menos trabajo que sus compañeros. Además, se da la circunstancia de que ellas son más maduras en la adolescencia, que es la etapa en la que se concentran la mayoría de las repeticiones 2º y 3º de la ESO, (en el gráfico adjunto se puede comprobar el salto cuantitativo entre los 12 y los 15 años).

Esta realidad es 'vox populi' para todos los implicados en el problema que, sin embargo, lo toman con una gran naturalidad. Así, Tamara, describe con desparpajo y rotundidad la situación: «Aunque me cueste trabajo quiero hacerme con el título porque es la única manera de poder conseguir después una titulación superior. Los chicos lo tienen más fácil: siempre pueden ser albañiles o fontaneros y ganarse bien la vida, para nosotras es más difícil porque yo no quiero ser peluquera, eso está ya muy visto», concluye sincera. Su futuro está en sus manos y ella lo sabe.

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